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16 oct 2013

"Soylent Green" (1973): Sabor a cine bien hecho

–¿Cuál era su nombre completo?
–William R. Simonson.
–¿Profesión?
–Rico.

José Manuel Gomis Aracil
España


¿Qué sería de "Blade Runner" (1982) sin "Soylent Green" (1973)? ¿Qué sucedería si en un futuro, no muy lejano, no existiera comida para una sociedad superpoblada? Esta pregunta también se la hizo H.G. Wells hace cien años en su obra "La máquina del tiempo". El escritor inglés planteó en uno de sus viajes imaginarios cómo el hombre recurría al canibalismo para paliar la falta de alimentos y cultivar la docilidad de unos seres humanos alimentados como ganado por una subclase de humanidad escondida bajo tierra.

En esta fábula kafkiana de 1974, basada en la novela "Make Room! Make Room!" de Harry Harrison, se dan los mismos tópicos pero desde un punto de vista mucho más real, y combinando toda la historia con una trama policíaca al más puro estilo Chandler y sus novelas negras.
 

No se está ante una gran película, pero todo rebosa ese sabor a cine bien hecho por el irregular Richard Fleischer, director que nunca remata sus películas, pero aporta un interés especial cuando uno revisa su filmografía: "The Vikings", "20000 Leagues Under the Sea" o "Fantastic Voyage". En la década de los ochenta rodó la prescindible "Conan the Destroyer", otro pequeño fiasco.

No obstante, en esta película aparecen otros motivos en los que el director podría haber basado su carrera. Cada plano rebosa de su propio carácter con un buen trabajo fotográfico de Richard H. Kline, y una sensacional moralina muy propia de la ciencia ficción, aportando un rendimiento extraordinario. Lo policíaco y el suspense se mueven en esta historia, en la que no se sabe nunca de qué está hecho un alimento que se reparte entre la población de la superpoblada Nueva York y que sirve de alimento para los humanos: el Soylant Green.

En un hipotético futuro donde la ciudad de Nueva York vive superpoblada, un pequeño colectivo que sostiene el poder político y económico mantiene el gobierno de la humanidad controlando el acceso a la alimentación masiva de los seres humanos, fabricando dos variedades de un producto comestible, Soylent Red y Soylent Yellow, que son la única fuente de alimentación. La producción de alimentos naturales se ha extinguido por el efecto invernadero y la compañía Soylent es una empresa que fabrica y provee alimentos procesados de concentrados vegetales. Pero surge un nuevo producto: Soylent Green, basado en un combinado de plancton.

Robert Thorn (Charlton Heston) es policía y vive con su amigo "Sol" Roth (Edward G. Robinson), un anciano profesor que se dedica a recordar otros tiempos en los que todo era más habitable y había suficiente alimento para todos.

Thorn es reclamado para investigar el asesinato del principal accionista de la compañía Soylent, William R. Simonson, interpretado por el genial Joseph Cotten, que aparece asesinado en su apartamento. El policía hace una visita al lugar y encuentra el cadáver del millonario entre un charco de sangre. A él le llama la atención la opulencia y los extraños artilugios con los que convive el excéntrico millonario: frigorífico, licores, una ducha, jabón y una extensa biblioteca.

Más tarde, Thorn conoce a la concubina de Simonson, Shirl, a la que da vida Leigh Taylor-Young, llamada eufemísticamente parte del mobiliario, en clara alusión a las femme fatale de las novelas negras de los cuarenta y al guardaespaldas de Simonson, Tab Fielding interpretado por Chuck Connors, para mayor gloria del cine. Thorn interroga a los dos nuevos sospechosos y descubre que Simonson le había ordenado acompañar a Shirl de compras, y que por esa razón no estaba en el apartamento en el momento del asesinato.

Mientras Thorn continúa con la investigación, Sol Roth se siente viejo y decide ir a morir en un sitio llamado El Hogar, el cual recrea, mediante imágenes y sonidos el mundo como él lo había conocido en su juventud. Mientras agoniza, le dice a Thorn que siga la pista de su cuerpo una vez muerto y descubra qué es lo que sucede con sus restos. El rastreo del cadáver del viejo Sol descubre a Thorn el destino real de todos los cuerpos humanos. En su periplo destapa el verdadero componente del deseado Soylent Green.

Las películas futuristas clásicas ya quedan en un segundo plano porque hoy día con tantos medios técnicos todo queda superado, pero este filme es una excepción. Tiene un buen argumento, una buena puesta en escena, grandes actores (hasta los secundarios) y una sorprendente conclusión final.

Toda la trama podría suceder en un futuro no muy lejano, tengan cuidado con lo que comen. Por cierto, mucho mejor el título en español, más apropiado.

Título original: "Soylent Green". Títulos alternativos: "Soylent Green: Cuando el destino nos alcance" y "Cuando el destino nos alcance". País y año: Estados Unidos, 1973. Director: Richard Fleischer. Guión de:  Stanley R. Greenberg, en base a una novela de Harry Harrison. Elenco: Charlton Heston, Edward G. Robinson, Leigh Taylor-Young y otros.

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