"Scream" (1996): Wes Craven resucitó el género de terror

Por Pedro Sala Jiménez

Escritor y crítico de cine

España

A mediados de la década de los 90', el cine de terror se encontraba en una crisis por muchos que los críticos afirmasen lo contrario. La verdad es que Wes Craven acumulaba tres fracasos consecutivos, que John Carpenter hundía todo lo que tocaba, que Tobe Hooper tenía la televisión como hogar principal, que Dario Argento le costaba recuperarse de su fracaso americano y que a George A. Romero le era difícil hacer películas. Todos estos directores, auténticos revolucionarios del género de terror en los años 70', no atravesaban un buen momento en sus respectivas carreras; ya sea por un estilo desfasado, por la falta de ideas en sus historias o simplemente porque el terror estaba condenado a trasladarse a la pequeña pantalla.

Con un presupuesto de quince millones de dólares, "Scream" (1996) recaudó 107 millones de dólares solamente en Estados Unidos, convirtiéndose en un clásico moderno, colocando a Wes Craven en el Olimpo de los grandes directores, quien, para bien o para mal, resucitó el género de terror.

¿Cuál fue el secreto de su éxito mundial? El mismo reside en su original guión que aportó aire fresco al género.

La impresión que me dio cuando salí del cine fue que no había visto un slasher como los que se hacían en los 80', sino más bien parecía el juego de Cluedo. Es cierto que posee todos los tópicos de dicho subgénero, que hay un asesino disfrazado que va matando a cuantos más mejor y que el ambiente juvenil se respira a lo largo del metraje, pero la realidad es que "Scream" es un falso slasher. Se está ante un juego detectivesco cargado de muertes, en el que los personajes y los espectadores juegan a analizar pistas, a enumerar sospechosos y a deducir quién es el asesino.

Otro acierto de la película es el punto de vista cinéfilo que desprende sus noventa minutos de duración. El asesino realiza una pregunta sobre una película de terror de los 80' cuya respuesta dependerá la vida de los personajes. Esto provocará dos situaciones: una, que los protagonistas estarán todo el rato hablando de cine; y dos, que el espectador se introduzca en la trama de una forma interactiva porque ya ha visto dichas cintas y rebuscará en su memoria para responder a las cuestiones del criminal.

Como filme de terror, "Scream" es bastante decepcionante, pero como diversión es destacable. Según van pasando los minutos, la película mejora en todo y termina enganchando hasta su desenlace final.

EL MOMENTO: Su prólogo. Aunque muy parecido al de "Student Bodies" (1981) y al de "When a Stranger Calls" (1979), se ha convertido en una escena clásica en el género de terror. A DESTACAR: El guión escrito por el debutante Kevin Williamson provocó una nueva oleada de películas de terror, todas ellas parecidas a "Scream". LO PEOR: La decepción que puede provocar al espectador cuando vea que no es un slasher, sino un filme de misterio con suspense fuerte y algunas muertes.

Dedico esta crítica a Tiffany,

la única persona que consiento

que me llame nomito. Espero que te guste.

Título original: "Scream". Títulos alternativos: "Scream: Vigila quién llama" y "Scream: Grita antes de morir". País y año: Estados Unidos, 1996. Director: Wes Craven. Guión de: Kevin Williamson. Elenco: Neve Campbell, Courteney Cox, David Arquette y otros.