Escritor y crítico de cine
España
La fórmula sigue funcionando; casas encantadas, bosques lúgubres, espíritus, almas en pena...
Todas las películas de fantasmas tienen algo en común: el drama sin solución. Después de visionar "The Woman in Black" (2012) vinieron a mi mente las "grandes" del género: "The Changeling" (1980), "The Legend of Hell House" (1973), "The Innocents" (1961); incluso "Poltergeist" (1982) o "The Sixth Sense" (1999). Todas ellas basaban su historia en un drama del pasado sin solucionar que se despertaba de alguna manera en el presente. En este buen filme aparecen todos los tópicos ensamblados de manera magistral, con una puesta en escena magnífica y una elaboración digna de cualquier clásico de este subgénero.