Por Santiago González
Argentina
Considerada por Dario Argento como su película menos favorita, "Il gatto a nove code" (1971) en realidad es una de las obras que más merece ser revisada. Sí, es una cinta convencional, inclusive dentro de su historia todo tiene sentido y lógica (algo raro en el cine de Argento). Por la forma de estar filmada parece más una película británica de suspenso que un largometraje del populizador del giallo. De hecho, si otro la hubiera realizado, posiblemente el resultado hubiera sido el mismo, pero aun así la película está llena de grandes momentos y de ideas visuales realmente interesantes lo que la convierte en una obra para ser vista.
Para empezar, el espectador se da cuenta que puede seguir una historia que tiene sentido dentro de su mundo. Argento prefirió más lo narrativo y construir un thriller antes de que llevarse por ideas estéticas no narrativas. No es que la película no tenga este tipo de ideas, pero también tiene una historia que cierra por todos lados. Entre esas ideas estéticas esta aquella de mostrar al espectador como un asesino utilizando el pov (point of view o punto de vista) mediante la cámara y que los espectadores sean los ojos del criminal (recurso utilizado en la genial escena del tren).
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